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El mundo de los bienes raíces no solo implica la compra y venta de propiedades, sino también la transmisión de bienes de una persona a otra, especialmente cuando el dueño de un inmueble fallece. A este proceso se le conoce como sucesión, y es fundamental para garantizar que los derechos y obligaciones sobre una propiedad pasen de manera legal y ordenada a los herederos.
Si eres propietario de un inmueble o estás por recibir una herencia, conocer cómo funciona la sucesión te ayudará a evitar conflictos y asegurar la certeza jurídica de los bienes heredados. En este artículo, explicaremos qué es una sucesión, sus tipos y su importancia en bienes raíces.
La sucesión es el proceso legal mediante el cual una persona transmite sus bienes, derechos y obligaciones transmisibles a sus herederos tras su fallecimiento. En bienes raíces, la sucesión permite que las propiedades del fallecido pasen a sus herederos o legatarios de manera legal y ordenada.
Este proceso puede realizarse de dos formas:
Sucesión Testamentaria: Cuando el fallecido dejó un testamento donde especifica a quiénes quiere dejar sus bienes.
Sucesión Legítima o Intestamentaria: Ocurre cuando la persona fallece sin dejar testamento, y la ley determina quiénes serán los herederos.
Muchas veces se confunden los términos herencia y legado, pero son conceptos diferentes:
Herencia: Es el conjunto de bienes, derechos y obligaciones que se transmiten a los herederos. Incluye propiedades, cuentas bancarias, deudas y otros bienes.
Legado: Es la asignación de un bien específico a una persona, lo cual debe estar estipulado en el testamento.
Ejemplo: Si una persona deja en su testamento que su casa en Mérida será para su hija y el resto de sus bienes serán divididos entre sus hijos, la casa es un legado, mientras que el dinero y otros bienes forman parte de la herencia.
Ocurre cuando la persona deja un testamento, en el cual nombra a sus herederos y establece cómo se distribuirán sus bienes.
✅ Ventajas:
Evita conflictos entre los herederos.
Permite que el propietario decida quién recibirá sus bienes.
Facilita el proceso legal y reduce costos.
Para que el testamento sea válido, debe ser realizado ante un notario público y estar inscrito en el Registro Público de la Propiedad.
Cuando una persona fallece sin testamento, sus bienes se reparten conforme a lo que establece la ley, siguiendo un orden de prioridad.
Orden de Herencia en Sucesión Legítima:
Cónyuge e hijos (si los hay, heredan en partes iguales).
Padres o abuelos, si no hay hijos o cónyuge.
Hermanos o sobrinos, si no hay familiares directos.
Estado, si no hay ningún familiar reclamando los bienes.
❌ Desventajas:
Puede generar conflictos entre los familiares.
Es un proceso más largo y costoso.
No garantiza que la voluntad del fallecido sea respetada.
Si un inmueble forma parte de una herencia, el proceso de sucesión incluye los siguientes pasos:
1️⃣ Apertura de la sucesión: Se inicia el trámite en un juzgado o notaría, según sea testamentaria o legítima.
2️⃣ Declaración de herederos: Se identifican las personas que tienen derecho a heredar los bienes.
3️⃣ Inventario y avalúo: Se hace una lista de los bienes y se determina su valor.
4️⃣ Liquidación de deudas: Se pagan los impuestos, créditos o adeudos pendientes del fallecido.
5️⃣ Adjudicación de bienes: Se reparten los bienes conforme al testamento o a la ley.
6️⃣ Inscripción en el Registro Público de la Propiedad: Se inscribe la propiedad a nombre de los nuevos dueños.
Si heredas una propiedad, es importante realizar la sucesión legal para poder venderla, hipotecarla o modificarla. No regularizar la sucesión puede generar problemas como:
Dificultad para vender la propiedad, ya que legalmente sigue a nombre del fallecido.
Conflictos familiares, al no estar claro quién es el propietario legítimo.
Riesgo de que la propiedad quede intestada, si no se inicia el trámite a tiempo.
Lo ideal es iniciar el trámite de sucesión lo antes posible para evitar complicaciones legales y asegurar que los bienes sean administrados correctamente.
La sucesión en bienes raíces es el proceso mediante el cual una propiedad pasa a los herederos tras el fallecimiento del dueño. Puede ser testamentaria (si existe un testamento) o legítima (cuando la ley decide quién hereda).
Si eres propietario de un inmueble, hacer un testamento te ayudará a evitar problemas futuros para tus familiares. Si eres heredero, asegúrate de regularizar la sucesión para poder disponer de la propiedad legalmente.
En bienes raíces, la certeza jurídica es clave. Asesorarte con un notario o abogado especializado te ayudará a realizar el trámite de manera correcta y sin complicaciones.